La música, una medicina terapeútica

Un grupo de investigadores de la Universidad de Zúrich realizaron una revisión de 47 estudios que habían evaluado el efecto terapéutico de la música. Encontraron que sobre un total de mil cien pacientes estudiados, escuchar música antes de la cirugía disminuyó la presión arterial, el dolor, la ansiedad y el ritmo cardíaco en forma significativa en comparación con los pacientes que no la escucharon. También hallaron que el efecto era más importante cuando la música era elegida por los propios pacientes.
Se encontró que la música es efectiva para mejorar la calidad del sueño en personas que tiene insomnio. Una revisión científica realizada por el Aarhus University & The Royal Academy of Music Aarhus/Aalborg de Dinamarca encontró que escuchar música grabada por 30 minutos diarios permitió mejorar la calidad del sueño en comparación con los pacientes que no recibieron esta intervención.
La música, además, disminuye la ansiedad en pacientes con Enfermedad Coronaria. Una extensa revisión de las investigaciones en la materia, realizado en la Universidad de Dexler, Filadelfia, EEUU, en un total de mil trescientos diecinueve pacientes con enfermedad coronaria, observó que escuchar música diariamente disminuye la ansiedad, el ritmo cardíaco y respiratorio. También encontró que disminuye la tensión arterial sistólica, comúnmente conocida como presión alta. Este estudio observó también que es mayor el efecto cuando el propio paciente elige la música.
La música mejora los síntomas en niños con Trastorno del Espectro Autista. Un estudio realizado en Dinamarca en la Universidad de Aalborg, encontró que la misma tiene múltiples efectos beneficiosos en estos pacientes, en especial en las dificultades sociales que presentan. Asimismo Una investigación de la Universidad de Limerick, Irlanda, encontró que la práctica de 2 a 3 horas de danza por semana a lo largo 3 meses tiene efectos beneficiosos para los síntomas de la enfermedad reduciendo la rigidez y las alteraciones motoras, así como mejorando el equilibrio corporal. También se observó una mejoría en el equilibrio en comparación con los pacientes que no realizaron la actividad.